Dientes sensibles: Causas y tratamientos para una sonrisa sin molestias



La sensibilidad dental puede ser causada por el desgaste del esmalte o la exposición de las raíces de los dientes. También pueden ser un factor las caries, los dientes agrietados o astillados, los empastes desgastados o las enfermedades de las encías. Los tratamientos incluyen el uso de pasta desensibilizante y la aplicación de fluoruro. También se pueden llevar a cabo procedimientos como la desensibilización de las superficies radiculares y los injertos de encía quirúrgicos. Para prevenir la sensibilidad dental, es importante cepillarse los dientes correctamente, usar hilo dental diariamente y evitar los alimentos y bebidas ácidas. Además, se recomienda visitar regularmente al dentista.

Causas de la sensibilidad dental

La sensibilidad dental puede ser un problema incómodo y molesto que afecta a muchas personas. Existen diversas causas que pueden provocar esta sensibilidad en los dientes. A continuación, enumeraremos las principales causas de la sensibilidad dental:

Desgaste del esmalte dental

El esmalte dental es la capa externa protectora de los dientes. Con el paso del tiempo, el esmalte puede desgastarse debido al cepillado agresivo, el uso excesivo de productos blanqueadores, el consumo frecuente de alimentos y bebidas ácidas, o el rechinar de los dientes. Este desgaste del esmalte expone las capas internas y nervios del diente, provocando sensibilidad.

Exposición de las raíces de los dientes

Las raíces de los dientes, que normalmente están protegidas por las encías, pueden quedar expuestas debido a la retracción de las encías. Esto puede ocurrir debido a una incorrecta técnica de cepillado, enfermedades de las encías o envejecimiento. Cuando las raíces quedan expuestas, los nervios de los dientes se vuelven más sensibles a los estímulos externos.

Caries dentales

Las caries son agujeros en los dientes causados ​​por la descomposición de los restos de alimentos en la boca. Si las caries no se tratan a tiempo, pueden llegar a afectar la capa interna del diente, conocida como dentina. Cuando la dentina se expone, puede haber sensibilidad dental.

Dientes agrietados o astillados

Los dientes pueden sufrir grietas o astillamientos debido a traumatismos, bruxismo (rechinar de los dientes) o una mordida desalineada. Estas grietas permiten que los estímulos externos lleguen directamente a los nervios del diente, causando sensibilidad.

Empastes desgastados

Los empastes dentales tienen una vida útil limitada y pueden desgastarse con el tiempo. Cuando un empaste se desgasta o se desprende, puede dejar al descubierto los nervios del diente, provocando sensibilidad dental.

Enfermedades de las encías

Las enfermedades de las encías, como la gingivitis o la periodontitis, pueden debilitar el tejido de soporte de los dientes. Esto puede provocar la recesión de las encías y exponer las raíces de los dientes, lo que aumenta la sensibilidad dental.

Tratamientos para los dientes sensibles

La sensibilidad dental puede ser una molestia constante y afectar nuestra calidad de vida. Afortunadamente, existen varios tratamientos disponibles que pueden ayudar a aliviar este problema y brindarnos alivio. A continuación, se describen algunos de los tratamientos más comunes para los dientes sensibles:

Uso de pasta dentífrica desensibilizante

Una opción eficaz para tratar la sensibilidad dental es utilizar una pasta dentífrica especialmente formulada para dientes sensibles. Estas pastas contienen ingredientes desensibilizantes que ayudan a bloquear las señales de dolor y reducir la sensibilidad. Es importante utilizarla regularmente, siguiendo las instrucciones del fabricante, para obtener los mejores resultados.

Aplicación de fluoruro en áreas sensibles

Otro tratamiento recomendado para los dientes sensibles es la aplicación de fluoruro en las áreas afectadas. El fluoruro fortalece el esmalte dental y ayuda a reducir la sensibilidad. Puede aplicarse en forma de gel o barniz en el consultorio dental, o a través del uso diario de un enjuague bucal con fluoruro.

Desensibilización o adhesión de las superficies radiculares expuestas

Cuando las raíces de los dientes están expuestas debido a la retracción de las encías, se puede llevar a cabo un procedimiento de desensibilización o adhesión. Este consiste en aplicar una capa protectora de resina o sellador dental en las superficies radiculares expuestas, lo que ayuda a reducir la sensibilidad y proteger los dientes.

Injerto de encía quirúrgico

En casos más avanzados de retracción de encías, puede ser necesario realizar un injerto de encía quirúrgico. Este procedimiento consiste en tomar tejido de otra parte de la boca, como el paladar, y trasplantarlo a las áreas afectadas para cubrir las raíces expuestas. Esto ayuda a reducir la sensibilidad y restaurar la salud de las encías.

Tratamiento de conducto radicular

Si la sensibilidad dental se debe a una infección en el nervio dental, puede ser necesario realizar un tratamiento de conducto radicular. Este procedimiento implica la eliminación del tejido infectado del interior del diente y la posterior obturación del conducto radicular. Una vez realizado, el diente dejará de ser sensible y se preservará su estructura.

Consejos para prevenir la sensibilidad dental

La sensibilidad dental puede afectar significativamente nuestra calidad de vida, causando molestias y dolor al comer, beber o incluso al respirar por la boca. Afortunadamente, existen medidas que podemos tomar para prevenir e reducir la sensibilidad dental. Aquí te presentamos algunos consejos útiles:

Cepillarse los dientes adecuadamente

La técnica adecuada de cepillado es esencial para mantener la salud de nuestros dientes y reducir la sensibilidad dental. Asegúrate de utilizar un cepillo de cerdas suaves y cepillar tus dientes suavemente en movimientos circulares durante al menos dos minutos. Evita cepillar con demasiada fuerza, ya que esto puede causar daño al esmalte dental y aumentar la sensibilidad.

Uso diario de hilo dental

El hilo dental es una herramienta igualmente importante para prevenir la sensibilidad dental. Utilizar hilo dental a diario nos ayuda a eliminar los restos de comida y la placa bacteriana que se acumulan entre los dientes y a lo largo de la línea de las encías. El uso regular del hilo dental ayuda a mantener las encías sanas y reduce el riesgo de enfermedades periodontales que pueden contribuir a la sensibilidad dental.

Evitar alimentos y bebidas ácidas

Los alimentos y bebidas ácidas pueden dañar el esmalte dental y aumentar la sensibilidad dental. Es importante limitar el consumo de alimentos como los cítricos, el café, las bebidas carbonatadas y los alimentos azucarados. Si los consumes, intenta enjuagar tu boca con agua después para neutralizar los ácidos y proteger tus dientes.

Visitar regularmente al dentista

Las visitas regulares al dentista son esenciales para mantener una buena salud bucal y prevenir la sensibilidad dental. El dentista realizará exámenes preventivos, limpiezas profesionales y tratará cualquier problema dental existente. Además, el dentista puede recomendarte tratamientos específicos y realizar ajustes en tu rutina de cuidado dental para reducir la sensibilidad dental.

Al seguir estos consejos simples pero efectivos, puedes reducir significativamente la sensibilidad dental y disfrutar de una sonrisa saludable y libre de molestias. Recuerda, la prevención es la clave para mantener una buena salud bucodental.